no me remite a nada

aparece algo
algo nuevo viejo
como esa vez que estalló esa tormenta
y todo alrededor de mi se empapó

se podian ver reflejos en las piedras
y luces danzantes de colores
titilar

se endureció la arena.
los sonidos empezaron a retumbar

me olvidé de los latidos
de la campana en una iglesia
y me puse a divagar
que el universo era un espiral
de una sustancia espesa
con movimientos de huracan
en el estomago de una sirena

agua

verla ahora
todo el tiempo
no me resulta mas extraño
es comodamente siniestro

una ola de serpientes de agua
en su cabeza
se come el mar entero